miércoles 6 de febrero de 2008

Un día en blanco

Ayer pasé el día en Barcelona, donde se fallaba el Premio Biblioteca Breve. El viaje fue accidentado: tomamos el puente aéreo y, tras meternos en el avión, el despegue empezó a retrasarse. El comandante, solícito, dio todas las explicaciones pertinentes por megafonía: "una de las ruedas tiene un agujero, y no sabemos si aguantará hasta Barcelona. Va a venir a verla un técnico, y si cree que podemos salir, despegaremos enseguida. Y si no, cambiamos la rueda". Estupendo, pensé. Si el técnico pertenece al modelo Zapatero ("no es para tanto"), viajaremos con una rueda chunga. Si el técnico es modelo Rajoy ("esto es un desastre") pasaremos un hora metidos en un avión parado. Mientras, el bueno de Juan José Millás se preguntaba si era necesario dar tantos detalles"¿Y por qué tengo que saber que llevamos una rueda pinchada"?, se lamentaba el reciente ganador del Planeta. A mi lado, estóico, Fernando Marías leía el periódico, resignándose al destino, y la eficiente Carmen Ramírez se cambiaba en el cuarto de baño, pues estaba visto que no iba a poder pasar por el hotel.
La rueda se cambió, y llegamos a Barcelona una hora y media más tarde de lo previsto, con el tiempo justo para llegar a la rueda de prensa y enterarnos de que el Biblioteca Breve había sido concedido a Gioconda Belli. Conozco a esta autora más por sus ensayos que por sus textos de ficción, y también porque es tía de Laura Martínez Belli, que presentó"En tiempo de prodigios" en el DF. Por cierto, la novela de Laura, "Por si no te vuelvo a ver", sigue ocupando las listas de los más vendidos en Méjico. En el cóctel saludo a Silvia Martín, de Woman, con quien he estado un año cruzándome emails y llamadas de teléfono... sin que nunca nos hubiésemos visto las caras. Antonia Kerrigan, mi agente, me lleva a un rincón para hablar de mi nueva novela, de la que le he enviado las ochenta primeras páginas. Me encuentro a Félix Romeu, y a mi editora, Ana Datri.
En el almuerzo, una mesa divertida, con Rafael Vila San Juan, Ferndo Marías, Gloria (de Planeta), Toni Iturbe, Miguel (de Círculo de Lectores) y Juan Manuel de Prada. Los temas de conversación, tan variopintos y algunos tan demenciales que prefiero no volver sobre ellos. Volvimos a Madrid en el puente de las seis de la tarde, junto a Javier Moro, que ha vendido a Penélope Cruz los derechos de su novela "Pasión india". Me dice que no participará en la escritura del guión, y yo le recuerdo el consejo que me dio un amigo para estos casos de adaptación al cine de una novela: "Toma el dinero y corre".
LLegué a Madrid a las ocho de la tarde y con un dolor decabeza de los que hacen época. Así que fue un día en blanco. Divertido, pero en blanco.Espero que el de hoy resulte más productivo laboralmente...

1 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

Un dia en blancotome un tren
erade cercanias y sugeriste vayamos almercado callejero,
en elmercadillo no había nada de lo que despues como winona ensayando un papel cambiaste de lugar en los almacenes de ...`s street,
ahora que laslineas paralelas de las vias deltren y sus vifurcaciones siempre vuelven a nosotros pero no depende de nosotros,
hacemos como si no lo supiesemos y damos por supuesto que un dia en blanco y sencillo lo has notado

15 de febrero de 2008 23:07  

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